La corta duración de la carrera deportiva y la necesidad de prepararse para el futuro plantean desafíos únicos para los atletas profesionales
MÉXICO.- Los deportistas de alto rendimiento se retiran con la mitad de edad a la que suelen hacerlo otro tipo de profesiones.
La brevedad de la carrera deportiva y los cambios significativos en los ingresos durante la misma requieren que los atletas sean conscientes de la responsabilidad de prepararse emocional y financieramente para el momento del retiro y su transición a ámbitos no competitivos.
En promedio, los deportistas profesionales se retiran a la edad de 32 años, lo cual representa la mitad de la edad de retiro de otras profesiones.
Esta realidad plantea desafíos particulares, ya que los deportistas deben enfrentarse a la necesidad de encontrar nuevas direcciones en sus vidas y asegurarse de contar con los recursos necesarios para su futuro.
Durante su carrera, los deportistas pueden experimentar altibajos en términos de éxito y, como consecuencia, variaciones significativas en sus ingresos.
Además, factores como la popularidad del deporte que practican, la existencia de ligas y equipos profesionales, y la capacidad para obtener patrocinadores, becas y apoyos gubernamentales, juegan un papel determinante en la remuneración recibida.
Por otro lado, el establecimiento de contactos sociales, el nivel de popularidad alcanzado y las inversiones en la formación de capital humano propio, como estudios académicos, son elementos cruciales para asegurar un futuro próspero después de la carrera deportiva.
En este sentido, las necesidades de asesoría financiera de los deportistas no difieren mucho de las de cualquier otra persona. Es fundamental que todos seamos responsables en la forma en que administramos nuestros gastos y aseguramos recursos para el futuro.
Para enfrentar estos desafíos, se sugieren algunas estrategias clave:
Ahorrar durante los períodos de bonanza: Los deportistas deben aprovechar los momentos de abundancia para acumular recursos sin que esto represente restricciones en su estilo de vida.
Evitar el consumo superfluo: Es importante realizar una evaluación honesta de las verdaderas necesidades de consumo y enfocar los esfuerzos hacia bienes y servicios que brinden bienestar real y duradero.
Contar con un buen asesor financiero: Recibir asesoría especializada en la contratación de seguros y en la realización de inversiones es crucial para asegurar un futuro financiero estable. El Sistema de Ahorro para el Retiro (SAR) cuenta con especialistas que pueden brindar información detallada sobre su funcionamiento.
Comparar precios y opciones: Además de recibir asesoría financiera, es recomendable comparar precios, conocer las ventajas y desventajas de los productos y servicios que se ofrecen para administrar el patrimonio personal. Esta práctica permite tomar decisiones más informadas y responsables.
En conclusión, el retiro temprano de los deportistas de alto rendimiento plantea desafíos únicos que requieren una preparación adecuada. Con conciencia financiera, asesoramiento especializado y una visión a largo plazo, los atletas pueden asegurar un futuro próspero y exitoso más allá de su carrera deportiva.