Descubre qué sucede con las deudas y las herencias financieras tras el fallecimiento y cómo el testamento puede influir en este proceso
MÉXICO.- Las deudas y las herencias son temas que a menudo se entrelazan en la vida financiera, y es crucial comprender cómo funcionan, especialmente cuando un deudor fallece.
Según datos proporcionados por Coperva, entre el 1% y 2% de las personas que figuran en carteras vencidas son personas fallecidas, lo que destaca la relevancia de abordar esta cuestión.
El testamento se presenta como una herramienta fundamental que puede aliviar preocupaciones y conflictos al determinar el destino de los bienes del fallecido. Aunque generalmente las deudas se heredan, esto no implica necesariamente que los herederos deban utilizar sus propios recursos para saldarlas.
Jesús David Chávez Ugalde, director de Análisis y Estadísticas de Servicios y Productos Financieros de Condusef, explica que la forma en que se hereda una deuda depende del servicio financiero adquirido.
En el caso de productos bancarios, como tarjetas de crédito, así como en las Sociedades Financieras de Objeto Múltiple (Sofomes), la deuda se liquida automáticamente en caso de fallecimiento si el seguro asociado está activo.
Si no hay un seguro o no está vigente, la responsabilidad de pagar la deuda se hereda, pero esto no implica que los herederos deban asumirla con sus propios fondos, ya que el cobro se realiza sobre la masa hereditaria, que comprende los bienes del difunto.
Chávez enfatiza que, aunque un heredero podría decidir pagar la deuda si le interesa conservar el bien, la realidad es que la deuda se satisface con los activos del difunto, no con el dinero del heredero.
¿Qué sucede después del fallecimiento de un deudor? El primer paso es informar a las instituciones donde existe una deuda sobre el fallecimiento.
Luego, se realiza un inventario de tasación de bienes para determinar el valor del patrimonio y pagar la deuda. Si el patrimonio no es suficiente, se debe abonar de otras fuentes, y en este punto, la responsabilidad recae en los herederos.
Alan Ramírez, CEO de Coperva, una startup de servicios de atención al cliente y cobranza, destaca que el 80% de las deudas financieras suelen ser pagadas por los hijos, mientras que en las deudas bancarias, el 90% de las veces, son los titulares designados quienes se encargan de su solvencia.
En el caso de que un seguro de vida asociado a un crédito no esté activo, la deuda no se liquida automáticamente tras el fallecimiento del titular. En estas circunstancias, el heredero podría no disponer de los medios para pagar la deuda, incluso si desea conservar el bien.
Por ejemplo, en un crédito hipotecario, el banco podría rematar la propiedad y cobrarse la deuda de la venta. Si el monto no es suficiente para cubrir la deuda, no recae en el heredero la responsabilidad de saldarla.
Coperva señala que en el caso de deudas departamentales, estas no solo deben ser pagadas, sino que también siguen generando intereses incluso después de la muerte del titular, y en el 95% de los casos, el titular designado es el responsable de su pago.
Es importante distinguir entre beneficiario y heredero. Al firmar un contrato de crédito, el titular designa beneficiarios, que pueden ser diferentes de los herederos. Los beneficiarios reciben, por ejemplo, cualquier excedente de pago en el crédito, mientras que los herederos adquieren la propiedad de los bienes del difunto.
Para evitar complicaciones, Chávez Ugalde recomienda que el proceso de herencia sea específico y cuente con la asesoría de un notario. Además, recuerda que el testador sigue siendo el propietario de los bienes registrados a su nombre incluso después de hacer un testamento, por lo que puede venderlos, regalarlos o realizar operaciones con ellos durante su vida.
El testamento también puede modificarse según las necesidades del testador y debe ser realizado con la asistencia de un notario público. En resumen, entender cómo funcionan las herencias y las deudas después de la muerte es esencial para evitar sorpresas desagradables y conflictos familiares en el futuro.