Impermeabilizar tu vivienda no sólo se trata de proteger la azotea sino que se debe hacer con el propósito de mantener su vivienda en buenas condiciones y prevenir inconvenientes graves.
MÉXICO.- La temporada de lluvias está por comenzar, época del año en que muchas familias aprovechan para dar mantenimiento a sus hogares, como tapar goteras y revisar las zonas de humedad con la finalidad de evitar que el agua dañe sus viviendas.
Una mala impermeabilización, e incluso, desatender este tipo de mantenimiento, no sólo puede provocar daños y afectaciones estructurales al inmueble, también puede ocasionar que la plusvalía de su hogar se reduzca o peor aún, poner en riesgo el patrimonio construido con años de esfuerzos.
Oswaldo Arroyo, director de Líneas Especializadas de Comex, advirtió que resulta más caro no impermeabilizar su inmueble, ya que el deterioro deriva en la pérdida de valor de la propiedad.
Impermeabilizar, dijo, es proteger una inversión, ya que los hogares son bienes perdurables y en muchos de los casos, es el patrimonio más importante que se tiene.
Impermeabilizar y proteger nuestro inmueble de las inclemencias del clima garantiza que éste permanecerá en perfecto estado y eso mantiene o incrementa su valor”, insistió.
Entre las afectaciones que puede tener el no impermeabilizar, el directivo de Comex mencionó que, a corto plazo puede generar incomodidad, mal aspecto por la humedad dentro de los inmuebles; mientras que a largo plazo hay un deterioro de la construcción como desprendimientos de acabados como yeso, pintura o pisos, además puede generar la proliferación de hongos y algas, las cuales pueden afectar a sus inquilinos.
El directivo de Comex destacó que uno de los beneficios de los impermeabilizantes es que su durabilidad garantiza la protección del inmueble. Si bien, este periodo dependerá del tipo de impermeabilizante y su calidad, se pueden encontrar en el mercado productos con una duración desde tres hasta 15 años.
En tanto, Leonardo González, analista Real Estate del sitio inmobiliario Propiedades.com, recomendó que en aquellos estados o ciudades con alta o intensa actividad pluvial, se debe impermeabilizar y remodelar periódicamente no sólo la azotea, también los ductos de desagüe o filtraciones de goteras.
Respecto al gasto que se debe asignar a la compra de este material de mantenimiento, el especialista dijo, debe ser de 3 a 5% anual para el caso de una cuestión preventiva.
El experto inmobiliario indicó que las reparaciones o impermeabilizaciones se deben planear con tres o seis semanas de anticipación previas al inicio de la temporada de lluvias, pero no descartó hacer mejoras al hogar durante las lluvias para detectar posibles filtraciones de agua.
Enfatizó que se debe poner especial atención a los edificios o condominios, ya que aunque los riesgos sin idénticos al de las casas, su prevención implica una mayor coordinación vecinal y presupuestaria con los administradores y propietarios de los inmuebles.
La logística de evacuación así como los protocolos de protección civil ante una posible inundación son más complejos; aunque ante goteras o humedad en las paredes se debe monitorear cada departamento continuamente para programar reparaciones urgentes”, advirtió.
Goteras le restan plusvalía
A decir de los expertos, dejar de lado este tipo de mantenimiento repercute en el valor de su hogar.
El directivo de Comex abundó que las goteras o filtraciones severas de agua además de ocasionar una reducción de valor del inmueble, en casos extremos, ocasionan la pérdida total del mismo.
En tanto, Leonardo González puntualizó que dependerá de cada hogar, las afectaciones por no impermeabilizar pueden ser cuantiosas hasta 80% equivalente a si la propiedad hubiera sufrido un desastre natural como un sismo.
Señaló que la posibilidad de capitalizar la plusvalía al momento de vender, al ofertar una “vivienda en perfecto estado” o como si fuera nuevo, es mayor cuando hubo un mantenimiento programado periódicamente.
Protección a largo plazo
A decir de González, se deben tomar algunas consideraciones al momento de comprar un impermeabilizante como el costo, la caducidad, el proceso de aplicación y el mantenimiento.
Adicional a esto, Arroyo agregó que debe revisar aspectos relacionados al inmueble como el tipo de construcción, la disposición del techo y acabados para comprar el adecuado a la vivienda.
También debe revisar su desempeño y durabilidad, ya que algunos soportan todas las condiciones mencionadas y otros pueden emplearse en ciertas construcciones.
Fuente: Vivanuncios y El economista