A pesar de la fortaleza del peso mexicano, el precio de la gasolina en el país sigue siendo alto en comparación con otros países de la región
MÉXICO.- A pesar de contar con una moneda que ha tenido un buen desempeño en el último año, México se encuentra entre los países con la gasolina más cara de América Latina.
Según datos oficiales recopilados por Global Petrol Prices, el precio promedio del litro de gasolina Premium y Magna fue de 24.22 pesos al 26 de junio.
En comparación con otros países de la región, solo Uruguay y Chile ofrecen combustibles más caros que México. Uruguay vende el litro de gasolina a 31.90 pesos, mientras que en Chile el precio es de 26.84 pesos.
Cargar el tanque de gasolina en México cuesta el doble que en Colombia y Ecuador, y los precios también son más altos que en Estados Unidos y Canadá, según un informe de Global Petrol Prices.
La mayoría de las gasolinas que se comercializan en el mercado mexicano son importadas de Estados Unidos, y su precio está influenciado por la cotización del petróleo, que ha pasado de más de 100 dólares por barril hace un año a menos de 70 dólares.
El tipo de cambio también juega un papel importante, ya que a medida que la moneda se aprecia, importar productos, incluida la gasolina, se vuelve más barato.
Sin embargo, los precios de la gasolina también están determinados por impuestos, logística, márgenes de venta, ajuste de calidad, costos de seguridad y competencia.
Los analistas de Banorte prevén que el precio de la gasolina subirá debido a que el Impuesto Especial sobre Producción y Servicios (IEPS) contrarresta la fortaleza del peso.
A partir de hoy y hasta el 7 de julio, la gasolina Premium y el diésel en México no contarán con estímulo fiscal, mientras que el combustible regular o Magna recibirá un menor apoyo, según la Secretaría de Hacienda y Crédito Público (SHCP). Esto indica que es probable que los precios de la gasolina aumenten nuevamente.
Aunque los precios internacionales del petróleo han bajado y las importaciones se han abaratado debido a la apreciación del peso mexicano, el gobierno tiene la posibilidad de compensar las pérdidas que sufrió el año pasado por los subsidios mediante el incremento del IEPS por litro vendido.
Esta política pone en duda la posibilidad de una reducción en el precio de la gasolina, ya que todo depende de las decisiones gubernamentales sobre la recaudación a través del IEPS, según Luis Adrián Muñiz, subdirector de análisis de Vector Casa de Bolsa.
A pesar de la fortaleza de la moneda mexicana, los altos precios de la gasolina continúan siendo un desafío para los consumidores en México.