El director global de Mercado Pago destaca la oportunidad de expandir el acceso a tarjetas de crédito en la clase media baja mexicana, a pesar de la competencia en el mercado financiero y la baja inclusión.
MÉXICO.- La baja inclusión financiera en México representa una oportunidad significativa para el crecimiento de Mercado Pago, el brazo financiero de Mercado Libre.
La experiencia de la empresa en América Latina le ha permitido adaptarse a cambios gubernamentales a lo largo de los años, centrándose en tendencias a largo plazo y manteniendo una perspectiva sólida a pesar de la incertidumbre política. |
Osvaldo Giménez, director global de Mercado Pago, resalta la oportunidad de ganar cuota de mercado a través de la expansión de las tarjetas de crédito en un mercado altamente competitivo, donde históricamente este producto estuvo limitado a la población de ingresos medios y altos.
Giménez enfatiza que, a pesar de la competencia de bancos y fintech, la mayor oferta y el desarrollo tecnológico han acercado las tarjetas de crédito a un segmento más amplio de la población.
La gran oportunidad radica en expandir el acceso a las tarjetas de crédito en la clase media baja, que ha experimentado una limitada inclusión en este tipo de productos hasta ahora.
En cuanto a la apuesta por el crédito, Giménez señala que la economía positiva en Latinoamérica, y especialmente en México, brinda una oportunidad para lanzar nuevos productos financieros.
La confianza del consumidor en probar distintas soluciones financieras se ve respaldada por un buen momento económico en la región.
Aunque actualmente Mercado Pago opera en México como Institución de Tecnología Financiera (ITF) bajo la modalidad de Institución de Fondos de Pago Electrónico (IFPE), Giménez no descarta explorar otras figuras legales para ampliar sus operaciones en el país.
La flexibilidad en la adaptación a las regulaciones y cambios en el entorno legal es una estrategia recurrente para la empresa.
A pesar de la variabilidad política en la región, Mercado Pago se mantiene optimista sobre su crecimiento en México, donde se ha consolidado como la segunda aplicación financiera más utilizada.
La experiencia de la empresa en América Latina le ha permitido adaptarse a cambios gubernamentales a lo largo de los años, centrándose en tendencias a largo plazo y manteniendo una perspectiva sólida a pesar de la incertidumbre política.