Es normal que antes de una entrevista de trabajo tengas ciertas inquietudes y experimentes algunos niveles de nerviosismo y ansiedad, motivo por el que prepararte para este momento es importante
MÉXICO.- Cuando buscas empleo, una de las partes más importantes es prepararte con anticipación a todo este proceso que puede darte o no la oportunidad de conseguir ese puesto que tanto deseas.
La idea es que ensayes tus respuestas, prepares tu vestimenta, conozcas la ruta para llegar al lugar, o en caso de que sea a distancia, hagas las revisiones técnicas necesarias | Pexels
Es normal que antes de una entrevista de trabajo tengas ciertas inquietudes y experimentes algunos niveles de nerviosismo y ansiedad, motivo por el que prepararte para este momento es importante.
La idea es que ensayes tus respuestas, prepares tu vestimenta, conozcas la ruta para llegar al lugar, o en caso de que sea a distancia, hagas las revisiones técnicas necesarias.
Aunque hay otros aspectos a considerar y aquí te los compartimos:
1.- Tu currículum el más importante
Revisa a detalle cada palabra que escribas en tu currículum, ya que es tu pase a la siguiente etapa. Trata de que el diseño haga que tu información se vea organizada.
Puedes descargar plantillas gratuitas, acudir con un diseñador, o si lo profieres, puedes darle un toque único con ayuda de programas de diseño.
2.- Infórmate sobre la empresa
Para impresionar al reclutador, debes demostrarle tu interés por el lugar en el que deseas trabajar, así que una buena idea es investigar cada detalle de la empresa.
Cuando tengas toda la información, lo mejor será relacionar tus competencias con los valores de la empresa, para así demostrar en tu respuesta que estás interesado en contribuir con la evolución de la compañía.
3.- Créetela
Debes tener seguridad al momento de hablar con el reclutador y lo mejor es que te la creas. Demuestra que sabes exactamente el requisito que exigen en el puesto de trabajo y que eres adecuado para el puesto de trabajo.
4.- Usa a tu favor el lenguaje corporal
No te olvides del lenguaje corporal, porque cualquier movimiento que realices puede ser utilizado a tu favor o en tu contra, así que sé cauteloso.
Proyecta seguridad y confianza, tanto en tu forma de hablar, tus gestos y cómo te desenvuelves con el reclutador.