Según datos del Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi), la tasa de participación económica durante el tercer trimestre de 2020 fue de 72.6% para los hombres, mientras que la de mujeres en edad laboral fue de 39.9%
MÉXICO.- Diversos estudios han demostrado que fomentar la inclusión laboral con perspectiva de género tiene múltiples beneficios, no sólo para las empresas, sino a nivel macroeconómico.
La directora de Recursos Humanos en la plataforma de nómina y gestión de Recursos Humanos, Runa, Andrea Rojas, consideró que reducir la brecha de género no sólo implica fomentar la participación de las mujeres en los puestos laborales | Pixabay
La directora de Recursos Humanos en la plataforma de nómina y gestión de Recursos Humanos, Runa, Andrea Rojas, consideró que reducir la brecha de género no sólo implica fomentar la participación de las mujeres en los puestos laborales.
“También implica abrirles espacios en los puestos directivos y permitirles ser tomadoras de decisiones, además de promover la igualdad de salarios por el mismo trabajo”, expresó.
Según datos del Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi), la tasa de participación económica durante el tercer trimestre de 2020 fue de 72.6% para los hombres, mientras que la de mujeres en edad laboral fue de 39.9%.
Reducir la brecha de género implica varios beneficios para las empresas, según la plataforma de Runa, y a continuación te los detallamos.
Mayor valor para la compañía: Las empresas lideradas por mujeres son más rentables y generan mayores beneficios económicos, los cuales se calculan en 1.8 billones de dólares a nivel mundial, según el estudio de S&P.
Según este análisis, las empresas en las que las mujeres son líderes en las áreas ejecutivas y financieras, obtienen rendimientos superiores en relación al precio de las acciones, en comparación con el promedio del mercado.
Ambientes laborales más tolerantes y equitativos: La participación femenina en diversas áreas de las empresas propicia un ambiente laboral más tolerante y equitativo si se combina con políticas de cooperación y respeto.
Incentivo y motivación: Romper con el llamado “techo de cristal”, llamado así a los obstáculos que impiden que una mujer alcance puestos altos en las organizaciones, es un incentivo para que las trabajadoras se comprometan con la empresa, se sientan más motivadas y desarrollen al máximo su potencial.