Un seguro indemnizatorio te puede dar tranquilidad financiera. Compara qué ofrece una plataforma u otra. Es posible que por el mismo precio encuentres un producto que te dé una suma asegurada más amplia.
MÉXICO.- Es recomendable en la contratación de cualquier servicio financiero o póliza leer detenidamente las letras chiquitas del contrato. Busca qué exlusiones tiene el seguro que contratarás, muchas veces algunas profesiones o deportes de alto riesgo no están cubiertas por algunas aseguradoras.
Con mil pesos al año puedes proteger tu bolsillo y familia ante eventos en tu salud, accidentes, diagnóstico de enfermedades graves y fallecimiento. | Pexels
Existen productos de aseguramiento en diversos segmentos, como vida, salud, accidentes personales, conocidos como indemnizatorios, en ellos por un pago que muchas veces no rebasa los 1,000 pesos anuales se adquiere una suma asegurada que se entregará en el momento que el contratante enfrente algún incidente relacionado con la protección que contrató.
Los seguros indemnizatorios no contemplan deducible ni coaseguro y cada empresa que ofrece este producto tiene diversas formas de entregar la suma asegurada contratada a sus clientes.
Los seguros y asistencias indemnizatorias son productos que te protegen durante su vigencia contra posibles eventualidades que podrían afectar severamente tu patrimonio; dicha cobertura te protege a consecuencia de un incidente o un diagnóstico, durante el cual podrás reclamar tu póliza y la aseguradora/asistenciadora te remunerará con el monto de la suma asegurada o proveerá la asistencia que hayas contratado”, según información de Xsisí, insurtech especializada en la venta de estos seguros.
En estos productos el dinero se entrega directamente sin intermediarios y se puede usar para el fin que se requiera, siempre y cuando la reclamación sí esté relacionada con el incidente especificado dentro del contrato.
“El uso de la compensación será completamente a tu discreción sin tener que comprobar gastos o presentar facturas; en el caso de las asistencias, el servicio se otorgará sin cobro alguno dentro de las coberturas que marquen el certificado contratado”, detalló Xsisí.
Estos seguros tomaron relevancia durante la pandemia ya que surgieron algunos especializados para hospitalización en casos de padecer Covid-19. Las personas que contrataban esta protección se les entregada cierta cantidad por cada día que estuvieran hospitalizados por esta enfermedad, en algunas con un tope de hasta 50,000 pesos.
Norma Alicia Rosas, directora general de la Asociación Mexicana de Instituciones de Seguros (AMIS), informó que los productos que con sumas aseguradas fijas por fallecimiento o doble indemnización de muerte en caso de Covid o apoyo para hospitales, “realmente” fueron exitosos durante la pandemia.
“No solamente se compraban de manera individual, sino también algunas empresas vieron la necesidad de adquirir este tipo de productos para sus empleados y entonces comenzaron a ofrecerlos y a comprarse más”, informó la representante de la AMIS.
¿Qué tipo de seguro indemnizatorio contratar?
Existen seguros indemnizatorios de diversos tipos, por ejemplo, para accidentes personales, en estos productos con mil pesos podrías estar asegurado en caso de enfrentar alguna cuestión médica a causa de un accidente o muerte accidental. Las primas en estos productos rondan entre 328 pesos a 608 pesos al año.
Si no tienes acceso a los servicios de salud pública este seguro es una opción para tener protección financiera en caso de un accidente. Las sumas aseguradas van desde 10,000 hasta 50,000 esto depende de la prima anual que se pague, además de gastos médicos, tienen cobertura en caso de fallecimiento por muerte accidental.
Para las personas que usan la bicicleta también existen este tipo de seguros, con un precio desde 500 a 1,500 pesos al año, dependiendo la plataforma donde se contrate y las sumas aseguradas que se adquieran, que pueden ser desde 25,000 a 100,000 pesos. Empresas como Xsisí ofrecen un seguro indemnizatorio para casos de diagnóstico de cáncer.
Fuente: Xsixí y El Economista