La sequía histórica que afecta a miles de municipios en México podría resultar en una caída significativa en la producción de alimentos, lo que, a su vez, generaría un aumento en los precios de los productos básicos, advierte el director general del CNA, Luis Fernando Haro
MÉXICO.- La sequía que ha asolado a México, afectando a alrededor de 2,200 municipios en mayor o menor medida, se ha convertido en una seria amenaza para la producción de alimentos y ha suscitado preocupaciones en todo el país.
Luis Fernando Haro, director general del Consejo Nacional Agropecuario (CNA), ha alertado sobre las graves consecuencias que esta sequía histórica podría tener en la seguridad alimentaria y en el bolsillo de los consumidores mexicanos.
Haro ha destacado que aproximadamente el 80% del territorio nacional se encuentra bajo alguna condición de sequía, una situación que no se había vivido a esta escala desde 1957.
Esta crisis climática plantea desafíos significativos para la agricultura en México, y es motivo de inquietud tanto para los agricultores como para los consumidores.
Uno de los cultivos más afectados por la sequía es el maíz, con estimaciones que sugieren una posible caída del 60% en su producción. Otros cultivos, como la caña de azúcar y el frijol, también se ven perjudicados, especialmente en regiones clave como Sinaloa, el principal productor de maíz a nivel nacional.
A pesar de las lluvias extraordinarias ocasionadas por el huracán Norma en Sinaloa, Haro señala que estas precipitaciones no serán suficientes para mitigar el impacto de la sequía en los cultivos. Se espera que la superficie de siembra de maíz en el ciclo otoño-invierno del próximo año se vea afectada, aunque la magnitud de esta reducción aún es incierta.
En cuanto a la caña de azúcar, se ha registrado una disminución de casi un millón de toneladas debido a la sequía, y en el caso del frijol, los estados productores, como Zacatecas, informan cosechas muy por debajo de la media anual.
El problema de la sequía se extiende por todo el país, afectando especialmente a las entidades donde se concentra la producción de alimentos.
Haro advierte que, aunque no se conoce con precisión cuánto aumentarán los precios de los alimentos, la escasez de muchos productos como resultado de la sequía se traducirá en un aumento generalizado de los precios.
El director general del CNA sugiere que las soluciones a estos desafíos climáticos y al cambio climático en general pueden encontrarse en tecnologías agrícolas avanzadas y en el financiamiento que permita modernizar el sector agrícola mexicano.
También subraya la importancia de mejorar la eficiencia en el uso del agua, ya que una gran cantidad de plantas de tratamiento en el país no están funcionando correctamente, lo que dificulta la gestión sostenible de los recursos hídricos.
A pesar de estos desafíos, México sigue siendo un importante exportador de productos agroalimentarios. En 2022, las exportaciones agroalimentarias alcanzaron los 50,000 millones de dólares, y se proyecta que esta cifra aumente a 55,000 millones de dólares en 2023.
Para abordar estos y otros desafíos en la industria agroalimentaria, se llevará a cabo el Foro Global Agroalimentario en Guadalajara los próximos 30 y 31 de octubre.
El evento reunirá a productores, expertos, líderes empresariales y funcionarios gubernamentales para discutir temas relacionados con el cambio climático, la demanda de alimentos, la sostenibilidad y la seguridad alimentaria en el contexto del T-MEC, que involucra a México, Estados Unidos y Canadá.